Objetivos


La educación medioambiental es una parte esencial dentro de la oferta educativa del Movimiento Scout y un elemento vital para el desarrollo de mejores ciudadanos para el mundo. Desde el inicio del Movimiento Scout, los jóvenes han estado conectándose con la naturaleza, aprendiendo de ella y realizando acciones positivas para su medioambiente local y global.

El Programa Scout Mundial de Medioambiente provee apoyo a scouts para aventurarse en actividades de educación medioambiental, para aprender sobre la naturaleza y para tomar decisiones inteligentes sobre nuestro entorno, las personas y la sociedad – decisiones que reflejan la Ley y la Promesa Scout.



El Programa Scout Mundial de Medioambiente es una colección de herramientas, recursos e iniciativas para apoyar el desarrollo de la educación medioambiental en el Movimiento Scout alrededor del mundo. El programa está basado en unos principios y objetivos que proveen una base para la educación medioambiental en el Movimiento Scout.


Principios y Objetivos para la educación medioambiental en el Movimiento Scout

Los principios y objetivos forman la base que delinean el enfoque de la educación medioambiental en el Movimiento Scout. Los mismos reafirman el compromiso  con nuestro entorno y su lugar en el programa scout en general. Los objetivos identifican los temas medioambientales clave que encaran al mundo y proveen un enfoque para que el Movimiento Scout los enfrente.

Principios

  • La educación medioambiental es una parte esencial dentro de la oferta educativa del Movimiento Scout y un elemento vital para el desarrollo de mejores ciudadanos del mundo.
  • El Movimiento Scout ofrece oportunidades para experimentar y estar en contacto con la naturaleza.
  • Los Scouts están activamente comprometidos en programas educativos para tomar decisiones inteligentes sobre el medioambiente, las personas y la sociedad – decisiones que reflejan la Ley y la Promesa Scout.

Objetivos Educativos

Los Scouts están trabajando por un mundo en donde:

1. Personas y sistemas naturales tienen agua y aire limpio.

2. Existe suficiente hábitat natural para mantener las especies nativas.

3. El riesgo de sustancias dañinas para las personas y el medioambiente es minimizado.

4. Se implementan las prácticas medioambientales más apropiadas.

5. Las personas están preparadas para responder a riesgos medioambientales y desastres
    naturales.